Page 23 - DEMODA Primavera - Verano 2025
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DESOSTENIBILIDAD
En el mundo se venden 100,000 millones de prendas cada año de los cuales el 1% de los textiles en el mundo se recicla para crear
nuevas prendas de acuerdo con la Agència de Residus de Catalunya (ARC). El 11% se recoge selectivamente para ser reciclados o
reutilizados aunque en la mayoria de los casos se desechan dando un total de 147,000 toneladas de residuos textiles en el mundo
por lo que, es importante educar al consumidor y generar conciencia del impacto de sus acciones.
Cuidar adecuadamente tus prendas no solo ayuda a que duren más tiempo, sino que también preserva su aspecto y calidad. A
continuación, te ofrezco una serie de recomendaciones sobre cómo cuidar la ropa para que se conserve en óptimas condiciones
durante más tiempo.
1. Lavar con cuidado
No lavar con frecuencia innecesaria: Lavar las prendas demasiado seguido puede desgastar las fibras. A menos que estén
visiblemente sucias, considera lavar tus prendas solo cuando sea necesario, especialmente las que no se ensucian
rápidamente, como los jeans o las chaquetas. Lavar por separado: Separa la ropa según colores y tipos de tela (delicada,
pesada, etc.). Esto previene que los colores se mezclen o se estropeen y evita el roce entre tejidos más fuertes y delicados.
Ciclo adecuado: Usa el ciclo adecuado de la lavadora según el tipo de prenda. Por ejemplo, usa el ciclo suave para ropa
delicada, y uno más fuerte para prendas de algodón o mezclas resistentes. Si es posible, usa ciclos de baja temperatura, ya
que el calor puede dañar las fibras. Secar al aire: Siempre que sea posible, seca la ropa al aire en lugar de usar la secadora.
Esto ayuda a prevenir el encogimiento y el desgaste. Usar detergentes suaves: Opta por detergentes que sean menos
agresivos y que no contengan productos químicos dañinos.
2. Cuidado al planchar
Temperatura correcta: Ajusta la temperatura del planchado según el tipo de tela. Las prendas delicadas como la seda o el lino
requieren una temperatura baja, mientras que el algodón o el denim requieren una temperatura más alta.
Usa vapor: El vapor es ideal para eliminar arrugas sin dañar las fibras, además de ayudar a refrescar la prenda sin la necesidad
de lavarla.
No planchar sobre manchas: Asegúrate de que no haya manchas en la prenda antes de planchar, ya que el calor puede fijarlas
permanentemente.
3. Almacenaje adecuado
Perchas de calidad: Para prendas como abrigos, camisas o blusas, usa perchas adecuadas. Por ejemplo, las perchas de madera
son ideales para prendas más pesadas, como abrigos, porque mantienen su forma. Las de plástico o terciopelo son buenas para
prendas más ligeras. Doblar bien: Las prendas como sweaters, jeans o ropa de cama se deben doblar adecuadamente. No las
dejes apretadas en un cajón para evitar que se deformen. Usa bolsas de tela: Para ropa más delicada o fuera de temporada, usa
bolsas de tela o contenedores que permitan la circulación del aire, en lugar de bolsas plásticas, que pueden atrapar humedad y
causar daño.
4. Evitar la exposición directa al sol
La luz solar directa puede descomponer las fibras de la ropa con el tiempo, además de decolorarla. Siempre que sea posible,
guarda las prendas en un lugar oscuro o en estanterías cerradas. Si tienes que secar la ropa al sol, hazlo en un lugar sombreado.
5. Evitar el uso excesivo de productos químicos
No abusar de los suavizantes: El uso excesivo de suavizantes puede hacer que las fibras se vuelvan más frágiles, además de
afectar la capacidad de absorción de toallas o prendas de baño. Úsalos con moderación.
Evitar detergentes fuertes: Los detergentes demasiado fuertes pueden dañar las fibras a largo plazo. Escoge detergentes suaves
y específicos para cada tipo de prenda, como los diseñados para prendas delicadas o de lana.
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